Posteriormente, y navegando por el Mediterráneo, llegarán los llamados pueblos colonizadores: fenicios, griegos y cartagineses.
LOS ÍBEROS
Se extendían por el sur y el este de la Península Ibérica.
Vivían en poblados amurallados, los cuales construían en zonas elevadas para defenderse. Sus viviendas tenían formas rectangulares.
La mayoría de estos poblados estaban dirigidos por un rey.
El pueblo se dedicaba a la agricultura, la ganadería y artesanía (herreros, tejedores y escultores).
Tenían su propia moneda para los intercambios.
LOS CELTAS
Los celtas ocupaban la Meseta (centro de la Península Ibérica) y la costa atlántica (la actual Portugal, Galicia y la costa cantábrica, donde convivían con otros pueblos, como los vascones).
Como los íberos, vivían en poblados amurallados y elevados, pero sus casas, llamadas castros, eran de planta circular y estaban distribuidas de manera desordenada.
Los celtas se organizaban en tribus y se abastecían entre ellos, por eso eran poco comerciantes y se dedicaban, sobre todo, a la ganadería y un poco al cultivo de cereales. Además trabajaban muy bien los metales.
Como los íberos, vivían en poblados amurallados y elevados, pero sus casas, llamadas castros, eran de planta circular y estaban distribuidas de manera desordenada.
Los celtas se organizaban en tribus y se abastecían entre ellos, por eso eran poco comerciantes y se dedicaban, sobre todo, a la ganadería y un poco al cultivo de cereales. Además trabajaban muy bien los metales.
PUEBLOS PRECOLONIZADORES
EL IMPERIO ROMANO
CONQUISTA DE HISPANIA
En el año 218 a.C, los romanos desembarcaron en Ampurias con la intención de
conquistar la Península Ibérica. En ella se encontraban los
cartagineses, por ello los romanos y los cartagineses sostuvieron dos
guerras, llamadas guerras púnicas, al final de las cuales los romanos consiguieron vencer a los cartagineses, mandados por el general Anibal.
Pero la conquista de la Península Ibérica no fue tarea fácil, duró más de 200 años.
Los romanos conquistaron con facilidad la costa mediterránea, que había estado en contacto con los pueblos colonizadores; sin embargo, encontraron una gran resistencia entre los pueblos que habitaban el norte, el oeste y el interior de la península.
Los romanos conquistaron con facilidad la costa mediterránea, que había estado en contacto con los pueblos colonizadores; sin embargo, encontraron una gran resistencia entre los pueblos que habitaban el norte, el oeste y el interior de la península.
LA ORGANIZACIÓN DE HISPANIA
Una
vez conquistada Hispania, los romanos la dividieron, en un primer
momento en dos provincias (la Citerior y la Ulterior); más tarde pasaron
a ser tres (la Lusitania, la Bética y la Tarraconensis) y finalmente,
en el s. III d.C. quedó dividida en 5 provincias: Lusitania, Bética,
Tarraconensis, Gallaecia y Cartaginensis.
LA SOCIEDAD HISPANORROMANA
La sociedad hispanorromana estaba organizada en:
- Ciudadanos: muy ricos, como los grandes comerciantes, los propietarios de extensas tierras y las familias que procedían de Roma; y otros más humildes, como los artesanos y los pequeños comerciantes.
- Esclavos: personas que eran propiedad de otras personas y que trabajaban en el campo, en las tareas domésticas, en las minas o como gladiadores en el circo.
LA ROMANIZACIÓN
Los hispanos adoptaron poco a poco las costumbres y forma de vida de los romanos. Este proceso se llama romanización.
La romanización comenzó con los legionarios, que eran los soldados romanos. Estos transformaron los poblados de los celtas e íberos en ciudades romanas.
Además, impusieron como idioma el latín, reemplazando a las lenguas que se hablaban en Hispania, excepto el euskera que se mantuvo.
EL ARTE ROMANO
Los
romanos eran excelentes constructores. Sus construcciones eran muy
sólidas ya que utilizaban el cemento y el hormigón (mezcla de piedras,
cemento y arena).
También decoraban los suelos y paredes con pinturas o mosaicos,
realizados con pequeñas piezas de piedras o cristales de colores.